Sebastião Salgado y las Colecciones Reales. Encuentros en torno a la fotografía de paisaje

Palacio Real de Madrid. PHE22
31.05.2022- 04.09.2022

PhotoEspaña es una cita ineludible todos los veranos para los amantes de la fotografía. A pesar de que este 2022 se cumple su XXV aniversario, no parece que la programación haya estado a la altura de esas bodas de plata, ya que muchas de sus exposiciones ya se habían podido ver anteriormente.

Sin embargo, siempre se pueden descubrir tesoros nuevos en PHE. Vamos a destacar una exposición que nos ha convencido especialmente y que se titula: Sebastião Salgado y las Colecciones Reales. Encuentros en torno a la fotografía de paisaje.

*Expedicionarios acampados a orillas del río Jordán, Bonfils, 1891 (RB)*

Se trata de una de las pocas exposiciones de este PHE22 que ha sido producida para la ocasión y que además por primera vez, que yo recuerde, se expone en escenario nuevo para el festival, como es la sala Génova del Palacio Real de Madrid. La monumentalidad de los accesos y la arquitectura de la propia sala, ya de por si merecen una visita, y son el escenario ideal para esta exposición.

La exposición se plantea como un diálogo en torno a la fotografía del siglo XIX del paisaje prístino, y las fotografías contemporáneas de Sebastião Salgado que pertenecen a su libro Génesis.

*Río Negro, afluente del Amazonas (Brasil 2009) Sebastiao Salgado*

Se pueden establecer muchas reflexiones en torno a este intercambio de imágenes con más de 150 años de distancia temporal. La primera diferencia, en cuanto a la temática se refiere, estaría en la dificultad para encontrar estos paisajes primigenios; los fotógrafos vernáculos nos muestran espacios cercanos de la península ibérica, y Salgado ha tenido que viajar a los confines del planeta, utilizando helicópteros y demás medios. Aquí aparece la primera reflexión de la transformación y deterioro del medio natural por la humanidad.

*Recolector de durianes en Sumatra 2008. Sebastiao Salgado*

Una segunda comparación la podemos establecer en cuanto a la técnica de las fotografías. Tantos años de evolución tecnológica y no hemos mejorado la textura aterciopelada, la delicadeza de los infinitos tonos grises, la precisión de los detalles, etc. de las fotografías de colodión húmedo del XIX. Aquellas copias encargadas por la reina Isabel II, gran apasionada de la fotografía, a los mejores fotógrafos pioneros, tiene ese “aura” del que las fotografías actuales adolecen. A pesar de que admiro los fotopaisajes de Salgado, hay algo “artificioso” en los mismos, unos ajustes del blanco y negro un tanto preciosistas y exagerados, que se ponen más en evidencia ante la visión conjunta con las fotografías del XIX.

*Nogal del Emperador Carlos V en Yuste, Charles Clifford, primavera de 1858 (AGP)*

Tengo curiosidad por conocer si Salgado ha participado en este “duelo” y qué opinión tendrá del mismo. Este tipo de diálogos lo fomenta el Museo de la Universidad de Navarra MUN, en sus célebres proyectos “Tender puentes” , en los que un fotógrafo actual es invitado a dialogar con fotografías de su colección del XIX. Pero la diferencia estaría en que el fotógrafo invitado elige las imágenes vernáculas, y realiza un proyecto actual que dialogue con aquellas. Me temo que en esta exposición eso no habrá sucedido. Ni siquiera parece haber existido un comisariado que establezca debidamente esta conversación entre dos épocas tan lejanas.

*Salto del Ángel (Venezuela) 2006. Sebastiao Salgado*

Pero a pesar de todo la exposición es muy recomendable, sobre todo para descubrir las fotografías del Patrimonio Nacional, que expone a una treintena de los grandes fotógrafos de la época: Clifford, Laurent, Atkinson, Fazio…, que entregaban sus encargos a la reina en unos albumnes que se exponen aquí y que son auténticas joyas.

Otra de las curiosidades que he aprendido en esta exposición es que la reina nombraba la figura de “fotógrafo de cámara” al estilo de los pintores de la corte, a los fotógrafos que destacaban en la calidad de sus entregas.

*Vista del torrente llamado de los Mirlos, en el Monasterio de Piedra. Laurent y Cía., junio de 1877*

Y una última reflexión que me suscitó esta exposición, es el anacronismo de una legión de fotógrafos que fotografían hoy en día compulsivamente la naturaleza con la única pretensión de reproducir su belleza, identificados con la filosofía romántica de representar lo sublime, objetivo que ya cumplieron de manera insuperable aquellos fotógrafos del XIX.

*Glaciar Perito Moreno (Argentina) 2007. Sebastiao Salgado*

No puedo mostrar fotografías de las salas porque incomprensiblemente no está permitido tomarlas. Y el otro inconveniente es que la exposición es de pago (5€), aunque se puede acceder por una puerta diferente a las de las largas colas de la visita al Palacio Real (buscar carteles amarillos de PHE en la fachada principal del palacio).

Se vende un pequeño catálogo por 3€ en la tienda del Palacio Real