Fotografía y marketing digital son conceptos que suelen ir de la mano, porque una buena instantánea es clave para reforzar la imagen de una marca o para mostrar con todo detalle sus productos. Pero, ¿qué ocurre si el que intenta vender sus servicios online es el propio fotógrafo? En este caso podemos aplicar algunas técnicas de marketing que sabemos que funcionan muy bien dentro de este sector.
Segmenta a tu público
Si te preguntas «¿cómo vender mis fotografías?», lo primero que debes tener claro es a quién se las quieres vender. Definir a tu público te ayudará a tomar decisiones estratégicas como qué acciones de comunicación llevar a cabo, qué canales sociales emplear y qué precio ponerle a tus servicios.
Una búsqueda en herramientas como Google Trends te puede ayudar a hacerte una idea sobre cuáles son ahora las tendencias dentro del sector de la fotografía. Así sabrás qué servicios tienen más demanda y podrás empezar a investigar sobre el perfil de persona que los contrata.
Cuenta con una buena página web
En caso de que tengas la típica duda de «¿cómo vender mis servicios profesionales por internet?», debes saber que conviene ir paso a paso. Y el primer paso esencial es contar con una web. Pero no una cualquiera, necesitas una página que sea una buena tarjeta de presentación de tu trabajo y que se adapte tanto a tu público como a los servicios que quieres ofrecer.
La estética debe estar cuidada al máximo detalle y encajar con lo que esperan de ti quienes la visitan. Por tanto, no tendrá la misma imagen la web de un fotógrafo de bodas que la de un fotógrafo que se ha especializado en trabajar con influencers.
Hay que cuidar el contenido a todos los niveles. El texto es importante, porque permite a los visitantes conocerte mejor a ti y tu forma de trabajar. Además, te ayudará de cara a mejorar el posicionamiento orgánico si aplicas técnicas de SEO.
Por supuesto, tus fotografías deben ser las grandes protagonistas. En este caso, una imagen vale más que mil palabras. No hace falta que llenes la web de fotos, pero haz una cuidada selección de las que consideres que son tus mejores trabajos.
Crea un blog
En el sector de la fotografía el marketing digital se encuentra con los mismos obstáculos que en otras actividades profesionales. Uno de los más habituales es el hecho de que la conversión no suele producirse en una primera visita.
Es posible que el visitante llegue a tu web, vea lo que haces, pero no se ponga en contacto contigo. Por eso, debes ofrecerle algo que le aporte un valor añadido, que le invite a volver una y otra vez. De esta forma, va surgiendo el engagement y crecen las posibilidades de que, en el futuro, cuente contigo a nivel profesional.
La forma más sencilla de darle contenido de valor al visitante es a través de un blog. Un espacio dentro de tu web que te ayudará a convertirte en un referente para tu público. Por eso, no hagas que sea demasiado comercial y no te pases el día hablando de ti.
Piensa en un tema que sea de interés para tus visitantes y que tenga relación con tu actividad. Por ejemplo, si haces fotos de mascotas, el contenido de tu blog puede girar en torno al cuidado de los animales. Seguramente, no pasará mucho tiempo antes de que un amante de los perros que lea tu blog se ponga en contacto contigo para hacer una sesión de fotos de su fiel compañero de vida.
Utiliza las redes sociales
El social media marketing tiene entidad propia dentro del marketing online, así que no puedes obviarlo.
Empieza seleccionando las redes sociales en las que vas a trabajar (no hace falta que estés en todas) y completa bien el perfil, sin olvidarte de incluir un enlace a tu web. Después, empieza a crearte una comunidad de seguidores compartiendo lo mejor de tu trabajo.
Tus propios clientes también pueden ayudarte a lograr más difusión. Si están contentos, pídeles que publiquen alguna de las fotos que les has hecho y que te etiqueten en ellas.
No te obsesiones con conseguir miles de seguidores, lo que realmente te interesa es que quienes te sigan cumplan con el perfil de tu cliente potencial.
Humaniza tu marca
Eres un fotógrafo profesional, tus posibles clientes ya saben que haces unas fotos espectaculares. Así que tienes que darles un motivo concreto para que te contraten a ti y no a tu competencia. Esto lo lograrás si humanizas tu marca, y para ello vas a tener que mostrarte como persona. Por ejemplo, si te ha sucedido una anécdota en una sesión de fotos, puedes crear una entrada en tu blog hablando de ese tema.
Actuar de esta forma hace crecer la afinidad con tu público. Valoran tu trabajo y también a ti como persona, por eso te van a elegir a ti en lugar de a otro fotógrafo.
Para tu negocio de fotografía, el marketing digital te ayudará a aumentar tu visibilidad y captar nuevos clientes. No olvides que debes ir paso a paso, y que lo primero que necesitas es una web. Si quieres ayuda con su diseño, en Bluekea estamos a tu disposición.
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